miércoles, 26 de febrero de 2014

Descansa en paz Capitán

No sé muy bien qué decir ahora, ya que no estoy acostumbrada a hablar en funerales, pero usted se merece un reconocimiento por mi parte al haber sido mi capitán. Sus hazañas fueron incontables, y sus victorias más todavía. Quiero que sepa que esté donde esté siempre habrá gente pensando en usted, sobre todo su ahijado Thak, el cual no ha podido venir por sus entrenamientos y por no poder soportar el dolor de su pérdida. Debe de estar orgulloso de él, pues se convertirá en un gran inquisidor gracias a sus enseñanzas y por haberlo dejado en muy buenas manos, con el gran Maximus. Sé que le hubiese gustado mucho haber visto crecer a Thak y verlo convertido en inquisidor, pero los malditos herejes se lo han arrebatado.También a Eli le hablaré de usted, con el debido respeto que merece su persona, le inculcaré la disciplina que usted tenía en vida.

Debe saber también que todos los herejes a los que nos enfrentamos recibieron su merecido, y no nos molestarán en la gran batalla de Terra, y que sin usted esto no hubiera sido posible. Ya sólo queda que en Terra todo sea rápido y sin muchas bajas.

Siento no haberlo preparado antes, aunque mis heridas tan críticas han sido la causa, ahora tenemos los dos una gran cicatriz en el pecho, muestra de nuestra valentía. Y aunque no siempre nos hemos llevado bien, ahora que recuerdo aquel incidente hacia mi persona con su Jarric, yo no quería en ningún momento su muerte.

Algún día nos encontraremos de nuevo, capitán Zaddion.

Precioso amanecer




Este es el mundo que tú me brindas cada día, y que ahora he podido empezar a apreciar. Gracias por existir y estar conmigo día tras día, aguantando mis insufribles charlas vespertinas, y por levantarme de cada caída. Tú eres el amor de mi vida y siempre querré estar a tu lado, pase lo que pase.

Por favor, no me abandones jamás.

Tu bichito de luz, Lu.

Siempre Es eXtraordinariO

Hay una canción de un grupo que me gusta mucho, cuyo nombre es Lujuria, el cual me viene al pelo también para esta entrada, que me ha llamado mucho siempre la atención. Esta canción se llama "Las orgías de Ramsés el Grande". Quiero poner un trocito de la canción para que se vea de lo que quiero hablar.


¿Cómo puede ser 

Si aquel pueblo vivía sin miedo al deseo  
Que hoy alguien se asuste 
3000 años después?


Esa pregunta me la hago yo muchas veces. Yo según los expertos puedo ser considerada, a lo mejor no ninfómana, pero puede que llegue a rozarlo, pero sinceramente, el sexo es algo de lo que jamás podría estar mucho tiempo separada. ¿Por qué está considerado que hacerlo varias veces por semana es algo "malo"? ¿Por qué si quiero follar, fornicar, hacer el amor, frungir, copular, y unos cuantos etcéteras más, tengo que esconderlo? No quiero decir que vaya a ir a follar al parque a plena luz del día. Pero si voy a casa de mi pareja a hacerlo por puro placer, ¿por qué está a veces mal visto? 

¿Hemos vuelto a la época en la que hay que poner en la puerta el cartel de F.U.C.K.? (Que para los pocos que no lo sepan significaba: Fornication Under the Consent of the King, o en español, follar bajo el consentimiento del rey). ¡Pues yo digo que no! El sexo es una de las pocas cosas que nos quedan que es "gratis", y divertido. Y a partir de ahora jamás me sentiré mal por follar. 









Para los adolescentes que lean esto (que serán pocos)... Para follar hay que tener un mínimo de inteligencia, es decir, follar con condón, para prevenir las ETS y los malos momentos después.


Y si a alguien le interesara ver y deleitarse con fotos "especiales", aquí dejo mi twitter, para ambos géneros: https://twitter.com/Semy_20

Cinturones perfectos

Todo fue como de costumbre, merienda, cine y cama. Pero ese día me pidió algo diferente, se le veía en los ojos que me quería hacer las cosas que veía en sus películas porno favoritas, aquellas que yo ni aprobaba ni dejaba de aprobar, aunque también sentí un poco de curiosidad alguna que otra vez, pero jamás me había atrevido a confesarle. Tengo que decir que me sentí aliviada de poder hacerlo sin ser yo la que lo propusiera.

Se acercó a mí despacio, con una sonrisa en los labios, y contoneando sus caderas, a la vez que se desnudaba por completo para mí, pero sin dejarme que le tocase. Entonces con voz grave, pero dulce me ordenó que me agachara a la altura de su polla y chupara hasta que él me dijese basta. Yo me puse cachonda en aquel mismo momento, medio por la proposición, medio por la forma en que lo dijo. Obediente me agaché y tan pronto como estaba mi cabeza a la altura de sus manos, me agarró del pelo fuertemente, marcando el ritmo de cada embestida hacia mi garganta, de cada lametazo, de cada momento de placer. De repente tiró de mi pelo hacia arriba y me dio la vuelta con una agilidad que no le había visto mostrar antes, pareciera que la estaba guardando para este momento.  Me empezó a desnudar, rápido y bruscamente, sin paciencia para verme en todo mi esplendor.

Nuestra cama quedaba a un metro escaso de nosotros, así que me cogió en brazos y me tiró en ella de manera que quedaba totalmente expuesta a él. Nada más llegar a la cama me dijo que me estuviese totalmente quieta y empezó a besar por todas mis partes, incluso en las que yo tenía prohibidas para él, pero por el miedo que tenía y la excitación supe que tenía que aguantarme como fuese, pero no pude evitar estremecerme cuando llegó a mi coño y quiso empezar a lamer. Aunque fue un ligero arqueamiento de espalda él no lo pasó por alto y llegó el primer guantazo a la pierna izquierda, en el que solté un gritito mudo, y él soltó una carcajada, lo que hizo que me entrase más miedo todavía.

- ¿No estás cómoda haciendo esto conmigo? - Me preguntó con un poco de recelo por si le decía que no estaba bien, aunque yo sabía que lo deseaba con todas sus ganas así que aunque le tenía un poco de miedo le contesté.
- Sí, estoy bien cariño.
-¿Entonces por qué me llamas cariño? - Se le había iluminado la cara con mi predisposición a seguirle el juego.
- Perdón, amo. - Sabía lo que tenía que decir por las películas de BDSM y los libros que había visto. Últimamente era algo muy popular, y como siempre me había interesado el género me había informado mejor.
-Eso ya es otra cosa, parece que estamos hablando el mismo idioma ahora. - Y dicho esto volvió a asestarme un guantazo en la pierna.

Ahora sin más dilación empezó a lamer y a succionar con fuerza mi clítoris, haciendo que llegara a límites insospechables de placer, a la vez que él disfrutaba viendo mi cara de no poder hacer otra cosa que resoplar. Cuando se cansó, se quitó de encima mío y empezó a desnudarse él, cogiendo su cinturón y pasándolo alrededor de mis manos, haciendo una pequeña presión y levantando mis brazos hacia arriba del cabecero de la cama, allí lo enganchó y me dejó más expuesta todavía. Yo le veía bastante excitado y conforme pensaba las ganas que tenía de que me penetrara, parece que él pensó lo mismo, pues se puso encima mío y me la metió violentamente, pero con facilidad, pues ya estaba muy mojada para ese momento. Me agarraba el culo para darse más impulso, y aunque me hacía daño al tocar las paredes de mi interior, el placer era infinitamente mayor, no quería que dejara de metérmela nunca.

Al terminar la sesión me dio un beso en la frente, y cambiando totalmente el tono de su voz me preguntó si me había gustado, y yo totalmente satisfecha le contesté que repetiría tantas veces quisiera.



Cenizas que vienen y van

Fuego purificador, amado dolor incandescente que no me abandonarás ni siquiera con mi corazón helado de desamor. Siempre supe que realmente estabas junto a mí, siento no haberte liberado antes, pero tenía miedo de mí misma, miedo a que me abandonases por completo, o que en su defecto me absorbieras por completo. Creo que eso segundo es lo que más temía. Pero ya no, ya no tengo miedo de que de vez en cuando te apoderes de mí, incluso quiero que lo hagas. Por favor, acoge a esta pobre alma llena de maldad y quémala, destrúyela, haz lo que quieras. Porque al final es eso lo que queda, ¿no?


De polvo vienes y en polvo te convertirás.

martes, 25 de febrero de 2014

Van a cambiar las tornas

¿Sabéis? Yo creía que los cambios se veían con el paso del tiempo, que no me daría cuenta hasta que un día ya no hubiera otra forma de esconderlo. Pero me equivocaba. Los cambios pueden ser de un día para otro perfectamente, pueden ser hasta de una hora a otra, pero eso no es lo importante, ya que algunos cambios son para bien. El problema llega cuando no entiendes por qué ocurren estos cambios, por qué la gente ya no te habla de la misma manera, o por qué ya no hacéis las mismas cosas juntos. Alguna respuesta tiene que haber, eso seguro, pero de aquí a que se encuentre pueden pasar años.

¿Y por qué lo sé? Porque lo he vivido en mis propias "carnes", o mejor dicho en mi propio pensamiento. Al principio pensaba que eran imaginaciones mías, por eso no le daba importancia, pero poco a poco era peor, era mayor el desinterés en mi persona, aunque al haberme pasado otras veces antes y siempre recibir la misma respuesta, ya no quise preguntar una última vez.

Sé que la solución a esto es esperar, esperar a que la otra persona venga, a que sea ella la que se disponga a hablar y a querer entablar una conversación que no termine en obviedades, o sin posibilidad de continuación. Pero soy incapaz, lo admito, me parece imposible el intentar dejar de hablar, o invitar a quedar, es parte de lo que soy.

Será que quiero seguir siendo siempre una adolescente en el sentido de amistades se refiere, y no entiendo por qué si algo te gusta hacer, porque crezcas debemos dejar de hacerlo, si no nos hace daño, ¿por qué? Tenemos muy mal el sentido de evolucionar mentalmente, creemos que tenemos que dejar de lado las cosas que nos hacían felices, o que debemos hacer otro tipo de cosas de "mayores", ¡pero me niego! No pienso hacer las cosas que a los demás les parezca correcta sólo porque es lo lógico a tal o tal edad.

Bueno, creo que esto es suficiente desahogo por hoy. Buenas y húmedas noches

domingo, 14 de abril de 2013

Mi alegato

Mi señor inquisidor, a la respuesta a esa pregunta que me hace, sólo puedo declararme inocente.

Inocente de haber destruido una iglesia de mi Dios emperador, una iglesia corrompida por demonios que sólo deseaban ver una ciudad llena de tristeza, maldad y odio hacia mi Dios emperador. Sin mi desesperado ataque la iglesia hubiese sobrevivido, sí, pero ¿a qué precio? Al precio de que estaría totalmente el caos en ella, que un Dios oscuro habría podido traspasar la barrera de lo bueno y lo malo, para llenarlo todo de maldad.

Sí, soy psíquica, y como tal me siento orgullosa de poder oír a mi Dios emperador, y escuchar de su propia voz como quería que desmantelara ese cruel crimen hacia su eminencia. Ese clérigo no estaba en su sano juicio, estaba embriagado por el poder. La única salida era utilizar el poder que Dios emperador en toda su gloria me dio y fulminar a ese clérigo y la iglesia corrompida.

El otro caso del que se me acusa, la planta petrolífera, bueno, no lo puedo explicar. Como he dicho antes, soy psíquica, y el único que puede entender mis poderes es Dios emperador, no creo que haya nadie aquí que pueda juzgarme mejor que él, así que si en algún momento alguien me tiene que juzgar por algo que ni siquiera yo llego a comprender, mejor que sea él y no usted, y perdone mi desfachatez.

Además, yo soy la única que está sirviendo en todo su esplendor a Dios emperador, ya que soy yo quien trae otro psíquico para poder ayudarle, porque si él me lo pide, yo se lo daré para poder alimentarse y que así vuelva a la vida, que termine su letargo y pueda estar de nuevo entre nosotros.

martes, 9 de abril de 2013

Estudios sin estudiar

Bueno. Hola. Buena suerte, la vas a necesitar.

Día de examen, lengua para ser más exactos, ¿y por qué escribo hoy? ¿Por qué no mañana sin tener que repasar y después de haber hecho el examen?

Pues no sé, me apetecía hoy escribir, y como tampoco estoy repasando, lo mismo da, que da lo mismo si me pongo a escribir en el blog.

Hoy es la primera recuperación del trimestre, sí... No debería ni siquiera tener una recuperación, pero aquí estoy, a ver que pasa esta tarde, porque seguramente al final no sirva para nada y tenga que presentarme en junio, pero no importa, ¿qué más dará una de más o de menos?

Lo importante es que al final del año que viene por fin esté todo aprobado y pueda acceder al grado superior que quiero. Estoy por tirarlo todo ahora por la borda y esperar al año que viene y coger segundo de bachiller con más ganas, porque vaya añito.

Pero ya que estoy y quedan menos de dos meses, ya habrá que terminarlo y pasar con las menos posibles, y buscar un trabajo (si lo hubiese), para las mañanas.

domingo, 23 de diciembre de 2012

Querido diario

Como esto no lo lee nadie, lo puedo utilizar como mi diario virtual, y si alguien lo lee, y me conoce, sí, me refiero a ti melocotón (porque ya eres la única que lo lee de muy, muy de vez en cuando), no te preocupes por mí, seguro que para cuando lo leas ya se me ha pasado.

Pues bueno, sólo quería decir que, tachan, ¡soy una mierda!

Por fin me he dado cuenta, después de tanto tiempo dándole vueltas, y pensar el por qué no estaba a gusto conmigo misma, me he dado cuenta. Y es que no sirvo para nada. No valgo nada, ni intelectualmente, ni físicamente, ni psicologicamente, ni socialmente.

No soy lista, no soy avispada, no tengo lógica y tampoco sé usarla, no tengo muchos conocimientos sobre nada, y todo lo que aprendo se me olvida fácilmente. No puedo correr durante más de 10 minutos, no puedo hacer pesas, no tengo un buen cuerpo, no tengo buenas piernas, y tampoco tengo la voluntad para entrenar, ¿y yo quiero entrar en el ejército? ¿En qué demonios estaría pensando?
No tengo sensibilidad con las personas, no tengo ni puta idea de cómo meterme en el papel de los demás, y mira que lo intento, pero hay veces que me superan las situaciones y no soy capaz de imaginarme en ellas.
Tampoco sé qué hacer para contentar a todo el mundo, y eso es lo que más me preocupa de todo. Quiero a un montón de gente, pero lo único que hago es apartarlas de mi lado, ¿por qué? Por intentar contentar a todo el mundo, pero sé que no puedo, y me frustra, y quisiera poder hacerlo, pero...

Por eso soy una mierda, no valgo para nada. Y quiero poner muchas más cosas, pero sé que puede que me arrepienta, quiero ser un poquito mejor, pero no sé cómo, y  luego llegará alguien que me diga pues así, así, y así, pero no podré seguirlo, y no entiendo qué me pasa, ¿por qué no soy capaz de seguir unos putos consejos?

También soy tímida, me he dado cuenta de que me he vuelto muy introvertida, ya no hablo tanto como hablaba antes, me da miedo hablar de algo que pueda molestar a alguien, me da miedo meter la pata diciendo algo que no es correcto, o algo que yo pienso que sí lo es, pero en realidad no lo es, porque si me equivoco puedo decir algo que toque la moral a nadie en particular y a todos en general.

Debería simplemente alejarme de todo cuanto quiero, todo sería más fácil para todos. Podría empezar una nueva vida, de cero, y no tendría que atosigar a la gente cuando me entra el miedo de que me abandonen, y de lo que no me doy cuenta es que las estoy alejando yo misma sin querer. Pero tampoco quiero eso, no quiero dejarlos, y no quiero que me dejen tampoco, son mi familia y los quiero con todo mi corazón y más.

Hay días en los que solo me apetece llorar y llorar y nada más que llorar, y gritar hasta quedarme afónica, o pelear, pegarle a las paredes, hasta que me destroce los nudillos. En esos momentos lo único que tengo dentro es rabia, rabia de que no me salgan las cosas como quiero, porque aunque no lo parezca también tengo rabia acumulada, pero no soy capaz de soltarla, porque podría lastimar a alguien, o podría empeorar las cosas si estoy hablando con alguien. Por eso soy muy impulsiva cuando hablo, porque perro ladrador, poco mordedor. Lo prefiero así también.

Hay que ver que solo escribo cuando estoy triste.

lunes, 10 de diciembre de 2012

Opiniones, opiniones

¡Y aquí llego yo!

¡Buenas noches amado lector que lees de vez en cuando este blog!
¿Cómo se encuentra usted hoy?

Bueno, me ha faltado un poco de tiempo para escribir yo también, sobre la última gran novela erótica: 50 Sombras de Grey. Para todos aquellos que no les guste la saga, por favor les invito a salir ahora mismo del blog, o puede que empiecen a soltar espuma por la boca y no es mi intención. Las salidas se encuentran arriba a la derecha, en un cuadradito con una X (en la mayoría de los casos, roja), arriba a la derecha haciendo un simple click en "siguiente blog", o arriba en la X pequeña de la pestaña si usas Google Chrome, o Mozilla Firefox, (si usas Google Explorer... lo siento). Gracias.

Bien. La trilogía que me ocupa, aunque muchos les cueste admitirlo, es una buena trilogía. Le faltan cosas, es verdad, y puede que a veces repita otras, pero al fin y al cabo cumple la misión literaria, enganchar. Y es que el tema del BDSM no es un tema que pase por alto a nadie, y más en una sociedad donde todos los tipos de prácticas sexuales ajenas al sexo convencional, llama la atención, y el sadomasoquismo no iba a ser menos.

Pero no vengo a hablar del BDSM en sí, si no a la novela. Tiene un poquito de todo, puede que tire demasiado al principio del masoquismo para enganchar y luego caiga en una novela erótica sin más, pero no se puede negar que es una gran novela erótica, con su puntito policíaco y todo. Pero siempre es más fácil criticar que hacer una novela propia, y por mucho que critiquen, lo que en realidad duele es que una novela que para muchos no tiene nada fuera de lo normal, enganche tanto.

Christian Grey, ese gran multimillonario que todas adoran, y que al principio no entendíamos por qué les gustaba tanto, en la segunda novela se empieza a ver el por qué. No voy a contar nada relevante por si alguien quiere leerlo. Lo que atrae aunque no se diga es el misterio y el tabú que tiene el masoquismo, esa doble vida que lleva el protagonista, multimillonario de día, dominante de noche. ¿Y por qué no admitirlo? Si gusta una cosa, ¿por qué no probarla? Ahí está lo que a todos os duele, que a partir de esta novela puedes ponerte en la piel de Anastasia Steele, sufriendo y a la vez sorprendiéndote de que te guste. Simplemente da rienda suelta a la imaginación de cada uno, y si se prueba y gusta, ¿quién tiene el poder de decir que eso está mal?

Yo sólo doy mi opinión como lectora, y mi recomendación, son tres novelas que aun con la extensión que tiene, es muy amena, muy fácil de leer, y muy adictiva. Y si a partir de aquí se sueltan las ideas, mejor que mejor.

sábado, 25 de agosto de 2012

Trabajo en vano

Pues un día más que se acaba, y vaya manera de terminar, de la peor diría yo.
¡No es justo!

¿Por qué ella y yo no?
Porque ella es la favorita, ella "trabaja" mejor, ella es más "delicada"...

¡EXCUSAS!
Excusas todas ellas tiradas a la basura a sólo una bocanada de verdad.

¿Que ella es más detallista?
No me extraña, con la paciencia, por no llamarlo lentitud, que trae consigo yo también sería igual de detallista, pero la verdad señores, cansada a las 3 de la mañana, lo único que se me ocurre es limpiar lo más pronto posible para poder irme a dormir, y éste tipo de cosas son las que me quitan el sueño desgraciadamente.

Pero, ¿saben qué?
Que ella va a saber ahora lo que es trabajar sin mí, sin que yo le limpie casi todo por las noches, teniendo que salir más tarde porque no puede dar más de sí, con las manos llenas de callos de no parar de barrer y fregar.

A mí me vendrá bien el dinero, pero también me viene bien descansar, que han sido 3 meses muy duros y muy largos.

martes, 21 de agosto de 2012

Sin lugar en el mundo

¿Y a ti qué te digo?

A ti que has escuchado mis penas y mis fantasías hasta la saciedad, que me comprendes y me ayudas más que nadie muchas veces, que por ti me muero y a la vez te intento olvidar. 
No puedo vivir con tu recuerdo, pero tampoco sin él, eres lo mejor y lo peor que me ha pasado en la vida y aun así, aquí estoy, a las tantas de la madrugada sin poder dormir, o sin querer dormir por miedo a verte dormida, a besarte, a tocarte, a hacerte cosas que me odiaría a mí misma por el resto de la eternidad.

Sólo te digo que te vayas, aléjate de mí, deja de hablarme, porque sabes que yo no lo voy a hacer. 
Vete ya al infierno que ya nos encontraremos por allí.

Cuando tu vida se parte en dos...

...y no puedes hacer nada por evitarlo.

Maldigo el día en que llegué al mundo, maldigo el día en que empecé a razonar sólo de una manera y a no ver las cosas desde los dos puntos de vista.

Actuar con miedo, tener miedo de decir, de hacer, o de dejar pasar algo, sin darme cuenta de que hago daño a los demás. Miedo a actuar con naturalidad, preferir ser un robot o una máquina siempre rígida, recta y perfecta. Sigo siendo humana pero unas pocas horas al día.

Y yo los quiero, los quiero más que a mí misma, se puede decir que daría mi vida por ellos literalmente, para mí eso no es una simple frase que se dice por quedar bien. Yo los quiero a los dos tanto que no sé qué haría sin ellos, y a la vez quiero huir, huir bien lejos y no tener que sentir miedo de perderles al juntarles. De que ninguno de los dos haga algo que moleste al otro, que uno es un juguete de niño grande y el otro es un juguete de niño pequeño.

No quiero separarme de ninguno, ni lo voy a hacer, pero parece que todo va en contra de lo que yo quiera. Sé que no puedo tenerlo todo, y que una mentira no es mejor que la verdad, pero yo quiero que me mintáis, quiero ser una niña ilusionada creyendo que está todo bien y perfecto, que aunque la vida sea de color negro y no me guste el rosa, quiero un cielo rosado, con el arco-iris en medio y al final un leprechaun con su caldero de oro.

Y al igual que yo os quiero, sé que me queréis, que no me vais a dejar sola, ni me vais a dejar de ninguna manera, pero igualmente no es lo mismo poder estar con los dos sin sentirme culpable, a veros cada uno por su lado y sin ni siquiera miraros. No puedo, os juro que llegará un día en que me eche a llorar, y pegaré puñetazos como siempre a las paredes, y el día en que me lance a la carretera para no pensar más, que me lleve un coche y se acabe todo. Soy melodramática pero no veo una solución posible a este gran problema que me atañe.

Queridos míos, yo soy el problema aquí, y no vosotros entre vosotros, y no puedo obligaros a hacer nada que no queráis, y menos a ti mi melocotón, que eres la más afectada en todo esto, no puedo hacer que sus palabras no te hieran porque tú no eres como yo, despreocupada e infantil, tú eres metódica y precisa, y ves más allá de lo que yo veo. Y tú mi vida, no puedo intentar cambiarte más de lo que ya he hecho, no puedo hacer que cambies la forma de pensar en que todo va en un sentido malo, porque no lo es, pero eso te tienes que dar cuenta tú mismo.

Os tengo miedo y a la vez siento un gran amor por vosotros. Y no sé si lo entendéis.
Te quiero                              Te quiero    
 Me quieres                           Me muero
Te amo                                 Te amo
 Me amas                              Me marcho




No se puede tener todo a la vez, por mucho que lo desee.